Diversidad de Especies: para simular la diversidad de los ecosistemas naturales y sus dinámicas. Asociaciones de Especies: plantar simultáneamente, combinaciones de especies complementarias y beneficiosas entre sí. Rotación de Cultivos: alternar plantas de diferentes familias y con diferentes necesidades energéticas según la temporada.

Cuando las áreas de producción agrícola colinden con áreas naturales de protección, procure incorporar sistemas de amortiguación en los cultivos, plantando áreas productivas biodiversas, abundante vegetación nativa, árboles frutales, madereros y arbustos.

Es importante evitar el uso de fertilizantes, ya que pueden ser dañinos tanto para el suelo como para el medio ambiente y a largo plazo, agotan el suelo. En cambio, si queremos suelos más fértiles debemos buscar que la Red Trófica del Suelo esté lo más viva posible, de esta forma se construye la fertilidad biológica, química y física del suelo naturalmente.

Un manejo de plagas tradicional en base a plaguicidas químicos –venenos y antiparasitarios– puede generar un daño a largo plazo en el suelo. Se proponen métodos de prevención culturales como mantener un suelo sano y métodos de control biológico como la introducción de especies depredadoras.

Es necesario un uso eficiente sistemático del agua y evitar su contaminación. Para esto se recomienda: estudio del requerimiento hídrico de las especies, uso de coberturas de materia orgánica y uso de sistemas de riego tecnificado.

En Chile se reconocen diversas iniciativas que implementan la agricultura regenerativa como actividad productiva, destacando al Huerto Cuatro Estaciones (R. de Aysén), el Fundo Panguilemu (R. de Aysén) y el Fundo Los Chilcos (R. de Los Ríos).